17 de junio de 2008

El equipaje de la vida

El vendedor de alcatraces, Diego Ribera.

Tengo una mochila a mi espalda llena de sueños e ilusiones.
Lleva conmigo toda la vida, y normalmente es ligera, casi se podría decir que es ella la que me empuja hacia delante a la hora de tomar decisiones. Pero hay días en los que, sin razón aparente, se vuelve muy pesada, casi insoportable, anclándome al camino sin dejarme avanzar...

Decía un buen amigo mío que vivir no es difícil, a lo que yo argumentaba que lo difícil es vivir siendo felices, y que en la búsqueda y el intento se nos pasa la vida, cargados con mochilas que vamos llenando, equipajes que unas veces tiran de nosotros y otras los tenemos que arrastrar.

13 comentarios:

Pablo Esteve dijo...

La felicidad es un café a media mañana en medio de todo el mundo...

Srta. M dijo...

Esa mochila es la definicio mas acertada que he escuchado de todo lo que llevamos dentro (y fuera).

La felicidad para mi es tumbarse en el cesped, vaciar la mente, respirar, sentir que sabes donde estas y donde quieres ir, mirar el cielo y no pensar en la hora de levantarse.

p.d. tu fan nº1, tambien :)

Mónica dijo...

Hola Irene!, Yo intento llevar en mi mochila lo preciso, pero el día a dia la va llenando de cosas que pesan algo más y otras livianas y agradables que te hacen andar y llegar con una sonrisa a donde quieras. En este momento, metí tu texto y la imagen de los alcatraces pintados por Rivera y voy volando!.Besitos y gracias

Nébula dijo...

Más que tomarme la felicidad como fin último, sé que esta ya existe dentro. Mejor tener todos esos cachibaches que guardamos bien ordenaditos, por si algún día queremos echar mano de ella.

¿Luchar contra el peso? Sería eterno. Casi prefiero transformarlo, ordenarlo o desecharlo según convenga. Que al final creo que nos cabe todo en la trastienda :)

Laia dijo...

a veces si la mochila pesa mucho, es bueno dejarla un momento en el suelo y descansar para retomar el camino y soportar el peso con mejor ánimo y disposición.

Muchísimas gracias por el linkeo, un beso enorme y ánimo !

Anónimo dijo...

Vivir es difícil y complicado, gracias a Dios. Y si no lo fuera, no valdría tanto la pena. Besos.

Café con Agua dijo...

Irene, sabes que hay personas que viajan sin mochilas? ni llenas ni vacías?...

Disfruta de la tuya, esté como esté, eso ya significa que tienes equipaje a tus espaldas ;)


Besazos wapa!

Anónimo dijo...

Ya sabes que a mi me encanta llevar siempre mochila, así que el dia que te pese mucho me la dejas, que estaré encantado de llevartela...

Un besico

el patxisss

isobel dijo...

la felicidad, ummmmmmmm hermoso sentimiento que hace que se olvide todo lo demás, besos

Anónimo dijo...

Exquisito,
Con todo mis respetos, me gusto muchísimo su blog, mi mas sincera enhorabuena.
Reciba un afectuoso saludo.

Anónimo dijo...

mi cuadro favorito de diegoooo... no puedo dejar de escribirte, irenica!!!
A mí me encantan las bolsas y bolsos con mil compartimentos, mil cremalleras... la mía tiene un bolsillo con un botón rojo cosido. A veces se abre (muy a menudo, la verdad) y asoma la cabecilla de una muñeca delgadita, morena, de ojos achinados, que siempre me sonríe. La tengo desde hace tiempo. Me encanta llevarla cerca. Me da seguridad saber que está ahí, en su bolsillico.

...Y me deja peinarla!!

Hice otro bolsillo para un muñeco con camiseta de rayas que se coló por arte de birlibirloque en mi mochila. Les he puesto cerca. Creo que ahí están genial. Los dos.Juntitos.

Me chifla mi mochila.

Pilar dijo...

A veces esa mochila nos la tenemos que colgar por delante, para poder tener mas presente y más a mano nuestro equipaje...
besos

Anónimo dijo...

Saludos! De alguna manera he llegado directamente a está página tuya, donde muestras obra de Diego Rivera.

Ribera y Rivera. El españoleto amado y tenebrista. Y el segundo, muralista mexicano y lleno de desnudos con pieles morenas, algunas curtidas.... menos universal en su temática. En fin... un gusto encontrarle por aquí.

vnob