26 de mayo de 2008

Introspección (2ª parte)

Las dos Fridas, Frida Kahlo (1939).


A veces tengo la sensación de estar dividida en dos mitades...

Tengo dentro de mi una mujer rebelde, inconformista y luchadora que se indigna ante las injusticias, desprecia la espiral del consumismo y actúa siempre de forma meditada y racional.

Y conviviendo con ella hay otra mujer sensible y romanticona que le tiene miedo a todo, se apalanca delante de la tele a no pensar, se ha comprado un piso con una hipoteca eterna y toma las decisiones de forma impulsiva y apasionada.

La rebelde le echa en cara a la sensible haber entrado en el juego capitalista convirtiéndose en propietaria, y la sensible reprende a la rebelde por su incapacidad para relajarse y disfrutar de la vida.

Una quiere ir a todas las manifestaciones y a la otra le da pereza.

Una disfruta yendo de compras y a la otra le parece una frivolidad.

Yo trato de convivir con las dos, que se apretujan dentro de mi, y creo que, poco a poco, las voy conociendo mejor, y estoy aprendiendo a quererlas por igual y a extraer lo mejor de cada una porque, al fin y al cabo, todas somos la misma y buscamos lo mismo, como bien dice el titulo de éste blog...

9 comentarios:

jorge dijo...

El dia que le saques lo mejor a cada una de las dos...

lo malo es que la romanticona se vaya de mani, y la rebelde de tiendas.

Yo conoci a una rebelde que disfrutaba 8mucho) de la vida.

Casi todos cargamos con esa dicotomia; alegres/tristes, brillantes/oscuros, ying/yang

Srta. M dijo...

hay que quedarse con lo bueno de cada una pero dime, aun suerte que solo tienes dos, hay gente que tiene 3, o 4 o 5 o cientos y cientos, eso si es muy cansado!
aprender a seleccionar lo mejor para avanzar, eso si es un reto,
felicidades alicia :) ya queda un pasito menos

isobel dijo...

que divertido, si se enfada una puedes hablar con la otra,... pero que digo... entonces seríais tres, besitos

Anónimo dijo...

Pues yo creo que el auténtico secreto de la felicidad está en la combinación de las dos. No pienses en que te traicionas por comprarte un piso... es uno de los derechos mínimos del humano, tener hogar. Lo que pasa es que hoy en día, más que un derecho parece un lujo... besos.

Nome Andrés dijo...

Interesante el tema. Tenemos el corazón a rayas: Blanco y negro resumen nuestra vida. Pero yo no creo que todo valga en la misma medida. Unas cosas nos hacen crecer, otras... en fin. Para seguir el camino de la felicidad se necesita de cierta sabiduría. Según la tonalidad dominante de esas rayas, así seremos.

Un saludo

இலை Bohemia இலை dijo...

Ahora me siento en una etapa donde sólo soy una...y la multiplicidad sólo está en mi mente...

Besitos sonoros para ti...y para ti...(para que tu otra mitad no se encele)

:o)

Miss O. dijo...

...en el fondo yo creo que todos estamos hechos de un montón de trocitos de 'irenes' (por ejemplo) distintas...a veces chocan...a veces se complementan...pero que al fin y al cabo nos convierten en lo que somos...

Anónimo dijo...

Si, yo creo que todos tenemos dos versiones de nosotros mismos, y que podemos convivir con las dos. Siempre y cuando sepamos controlarlas, claro está.
Sabes? Mis dos yo coinciden en una cosa, adoran entrar en tu blog y leer tan increibles textos.
Cuanto transmites!!!
Besazos enooormes!!!

Pilar dijo...

Todos somos dos,opuestos y complementarios, lo malo es que a veces nos asusta, porque creemos traicionarnos...
Quédate con lo mejor de tus dos versiones y disfruta de las dos sin culpas...,la felicidad creo que es eso...
Un beso muy fuerte